■ Uno de los factores tomados en cuenta por el Ministerio de Salud Pública para aprobar una cuarta dosis fue el aumento en la circulación de la variante BA.2, que es realmente un sublinaje de ómicron, cuyo nombre científico es BA.1.

El aumento de casos "se debe a la mayor circulación de una variante con mayor capacidad de contagio, que es la BA.2”, dijo el ministro Salinas ayer y enfatizó en que la vigilancia genómica se sigue realizando en todo el país.

Consultado al respecto, el integrante del Grupo de Trabajo Interinstitucional para el covid-19 (GTI), Gregorio Iraola, dijo que “lo que se sabe” sobre esta nueva forma del virus es que genera una “modificación en la tendencia epidemiológica” tal como sucedió en Uruguay y en otros países de la región. En este sentido, Iraola enfatizó en que la realidad uruguaya en cuanto al virus y el repunte de casos “no es algo exclusivo ni raro” debido al comportamiento del sublinaje como tal.

“En los últimos tres meses se vio un aumento importante de la circulación y en el último mes fue particularmente abrupto”, explicó el científico en referencia a que ahora el 35% de los casos son BA.2. En el mundo también se han detectado los sublinajes BA.3 y BA.4 de ómicron. “Como siempre, el informe va desfasado de los tiempos reales, tampoco podemos descartar que en base a la gran movilidad y a los viajes al extranjero pueda estar circulando algún sublinaje más”, sostuvo ayer el ministro de Salud, Daniel Salinas. Y agregó que. a pesar de que no haya datos de la presencia de estas formas de covid, “eso no significa que haya ausencia". En este sentido, Iraola opinó que “es esperable” que BA.3 y BA.4 también lleguen en el corto o mediano plazo a Uruguay “en función de lo que vaya empezando a circular en el mundo”.